Obras Basket finalizó su participación en el primer torneo de la Liga Nacional Femenina 2018, luego de la derrota con Quimsa por 75-74 en tiempo suplementario, en la final disputada en El Templo del Rock. El elenco de Francisco Pirani estuvo a pocos segundos de la gloria, y aunque no pudo consagrar todo el esfuerzo hecho por sus jugadoras dentro de la cancha, demostraron una inquebrantable identidad colectiva, al remontar 14 puntos de diferencia, ante un equipo santiagueño que se mostró sólido en todo momento.
Lo cierto es que, a pesar de no haber sido suficiente para obtener el título, las Rockeras hicieron una temporada excelente en todos los sentidos. Fueron el equipo más efectivo de la liga, con un promedio de 78.9, y el que más puntos anotó, con 73.4 de media, contra 63.0 tantos recibidos por partido. Ganaron cinco de siete de local, y cuatro encuentros de visitante. Ofensivamente, fueron las más versátiles de la liga, siendo capaces de convertir dobles o triples con gran efectividad. Detrás de 6.75 mts., anotaron un 30% de sus tiros, y dentro de la línea, acertaron un 44% de sus lanzamientos. Ambos porcentajes fueron los más altos entre los ocho conjuntos participantes. Además, sumaron 35.3 puntos por juego en la zona pintada y 10.8 en ataques rápidos, dos rubros en los que también doblegaron al resto de los equipos.
Pirani, quien dirigió a las aurinegras en los dos partidos del fin de semana, entregó sus sensaciones una vez terminado el torneo. «El balance de la temporada es muy bueno. Tuvimos bajas importantes, y ante los obstáculos, siempre nos hicimos fuertes mentalmente. La peleamos con lo último que nos quedaba. Nos queda el sabor amargo de haber estado cerca , pero con el tiempo vamos a valorar mucho este subcampeonato . Pusimos a Obras bien arriba, y es todo merito de las chicas», dijo Francisco, orgulloso del esfuerzo de sus jugadoras.
En cuanto a sus individualidades, Andrea Boquete terminó dentro del podio de anotadoras de la liga. La mendocina, autora de 30 puntos en la final, promedió 17.9 en sus 19 actuaciones, además de 9.4 rebotes (12 en el partido definitorio). Por otra parte, Macarena Rosset concluyó como la líder asistidora del certamen, gracias a sus 100 pases de gol en 17 encuentros. La juninense, quien además sumó 15.5 unidades de media, no pudo jugar ninguno de los dos partidos del final four, por una lesión en la fascia plantar derecha. Asimismo fueron notables los números de Johanna Puchetti, con 11.7 tantos y 6.8 recobres, y Dayshalee Salaman con 10.2 puntos, 4.6 asistencias y 3.9 recobres.
Tampoco se puede dejar de lado la intensidad defensiva aportada por Ornella Pag en el perímetro, la garra constante de Belén Echeverría, capitana del equipo, el trabajo interno de Bárbara Landro, y los buenos ingresos de Micaela Sabater en la base, cuando se necesitó una portadora de balón que le de descanso a Salaman y Rosset. Obras construyó una identidad ganadora a lo largo de los 14 encuentros de fase regular, y lo demostró en la postemporada. Lamentablemente, no pudieron consagrarlo con un título.
Cabe destacar, de igual manera, que fue la primera vez que el club llegó a una final nacional en básquet femenino, desde su regreso a la institución en 2015. Por otro lado, pronto habrá revancha. El sábado 26 comenzará el segundo torneo de la Liga Nacional Femenina, con más figuras nacionales e internacionales en cada equipo. Obras ya probó que tiene todo lo necesario para ser campeón. El agrio sabor de la inmerecida derrota en la final será la mayor motivación para aspirar nuevamente al título.
