Para la temporada 2019, Obras Basket hizo una apuesta muy fuerte por las jugadoras de Inferiores en la Liga Nacional Femenina. Entre ellas se encontraba Rocío Bereilh, reclutada por el club a principios del 2018.
La base hizo un ruido ensordecedor en el primer partido del Torneo Apertura. El 9 de marzo del 2019, las rockeras superaron en el Templo del Rock a Quimsa de Santiago del Estero por 64 a 58. La marplatense sentenció la historia con un bombazo detrás del arco, a falta de un minuto para el cierre.
Bereilh recordó la jugada que marcó el inicio de una prometedora carrera. “Cuando metí ese triple, lo festejé con la tribuna donde estaban todos celebrando al igual que yo. Sí creí que podía meterlo, lo que no creí era que iba a tener un peso tan grande para darnos la victoria”, contó.
Si bien había sumado buenos números en aquel juego (nueve puntos desde el banco), esa conversión será inolvidable para la jugadora de 18 años. “Ese tiro ayudó a que el equipo me tenga más confianza, así como también el entrenador (Francisco Pirani)”, afirmó.
LA EVOLUCIÓN EN 2019 Y OBJETIVOS PARA EL 2020
A partir de ahí, Rocío se ganó un lugar dentro de la rotación del conjunto de Núñez. Esto le permitió sumar experiencia en un año completo, ya que también formó parte del equipo de Liga de Desarrollo Femenina y la U19 en el torneo de las Inferiores.
“De la temporada pasada, me quedo con muchos aprendizajes de saber mantener la calma en momentos «picantes» del juego. En saber el rol de cada una dentro del equipo y lo que debe aportar. Esto se aprende compartiendo equipo con buenas jugadoras como Florencia (Martínez), Diana (Cabrera), Burani y Belén (Echeverría), que además son muy buenas personas y ayudan mucho a las más chicas”, señaló una de las Juveniles de la cantera.
En cuanto a la Liga de Desarrollo Femenina, su participación activa en el torneo le permitió conservar el ritmo de juego y estar preparada de cara a la categoría superior. “Me sirvió para mejorar la toma de decisiones. Hay un rango más alto de errores en la LDD, lo que te permite aprender y experimentar. En cambio en la Liga, tiene que haber la menor cantidad posible de errores porque son jugadoras profesionales preparadas para hacer pagar la equivocación que se comete”, comentó.
El 2020 será un nuevo año de Bereilh en el plantel ahora dirigido por Santiago Peteresen. La joven de las formativas está con las expectativas de seguir creciendo junto con las jugadoras de jerarquía.
“En el club entrenamos para mejorarnos mutuamente, compitiendo entre nosotras. De manera sana, el competir es lo que nos hace seguir desarrollándonos y con las nuevas incorporaciones se pudo elevar el nivel de los entrenamientos”, destacó.
