Los jugadores de las Inferiores masculinas de Obras Basket continúan con los entrenamientos semanales desde sus casas. Si bien no cuentan con los mismos espacios que en el club, demuestran que siempre hay un lugar para poder realizar ejercicios físicos y técnicos.
Cada uno tiene su terreno marcado a la hora de llevar a cabo las prácticas. “Los entrenamientos los realizo en el patio de mi casa, donde tengo más espacio y libertad para moverme. Si es que no llueve, obvio, y si ocurre así voy variando entre la sala de estar de mi casa o mi habitación, dependiendo los ejercicios que tenga que hacer”, contó Tiago Coll, jugador de la U19 que competirá en la Zona Norte.
Por su parte, el integrante del equipo de U17 de la misma Tira, Lautaro Pagés, utiliza otro sector de la casa. “Las prácticas las realizo en el living, porque ahí hay espacio para hacer las actividades que dan los entrenadores y preparadores físicos”, señaló.
A la hora de conseguir materiales para los ejercicios, la creatividad caracteriza a los protagonistas del semillero rockero. “Cuento con todos los elementos que pide el entrenador, que por ahora han sido pelotas de básquet y tenis, una silla, y para trabajar el aspecto físico una toalla o colchoneta. Con la de tenis hacíamos ejercicios de reflejo y tacto. Con la silla realizamos movimientos de entrega y simulación de un defensor. Y la toalla la usamos como colchoneta y como una forma de barra”, explicó Manuel Oillataguerre, de la U15 que arrancará el torneo en la Zona Centro.
También, Lautaro Pagés añadió sobre las actividades que efectúan los Cadetes: “El preparador físico siempre nos pide un palo de escoba, una silla y una soga. Con la silla hacemos sentadilla y salto. Después, utilizamos el palo de escoba para los movimientos de cadera, coordinación y salto hacia un lado y el otro. Luego, con la soga realizamos 50 saltos”.
LA ADAPTACIÓN DE LAS INFERIORES A LA TECNOLOGÍA
A pesar de permanecer en sus casas, los jugadores siguen en contacto con los compañeros y el cuerpo técnico. Las distintas aplicaciones digitales, principalmente el Zoom, ayudan a conservar la comunicación frecuente en las formativas aurinegras.
Tiago Coll contó cómo se fue acostumbrando a la nueva modalidad de entrenamientos. “Creo que me adapté muy bien, algo que pensaba que no por el espacio y la falta de material. Pero hago los ejercicios que haría en la vida normal, reemplazando materiales o ideándomela para copiarlos”, manifestó.
Por otro lado, Santiago Giampieri, jugador de la U15 que compone la Tira Norte, resaltó la importancia del procedimiento actual. “Primero, arrancamos con unas series de actividades mandadas por el preparador físico Ramiro (Cornejo) y por nuestro entrenador Mariano (Rocco). Después, empezamos a entrenar por la aplicación Zoom. Es lo mejor que se puede hacer, entrenar vía aplicaciones para no perder el ritmo”, resaltó.
Las aplicaciones juegan un papel importante en tiempos de cuarentena. Es que, al permitir el contacto y la comunicación con el otro, los jugadores pueden recibir las instrucciones necesarias por parte del cuerpo técnico.
“Sirve para que entrenemos y no perdamos el ritmo, el entrenador pueda comprobar que estamos haciendo bien los ejercicios y corregirnos, y no dejar de vernos como equipo. Creo que eso es muy importante”, afirmó Santiago Giampieri.
Manuel Oillataguerre también respondió: “Me sirven en el aspecto de poder comunicarme con mis dos entrenadores, tanto de físico como de cancha, y poder interactuar ya sea en correcciones como en dudas”.
Por último, Lautaro Pagés aseguró: “Ayuda en muchos aspectos porque el preparador físico te va dando la rutina desde la aplicación, y vos la vas haciendo como si estuvieras en el club y eso te va mejorando día a día”.