Esta tarde continuó Obras en Obras, el programa que reúne a las inferiores del Rockero con ex leyendas del club, en charlas en las que se transmiten experiencias en la institución y en el plano internacional. Tras la presencia de Marcos Delía la pasada semana, Bruno Fitipaldo se sumó desde España, para compartir su trayectoria en Obras y en su formación como profesional.
El uruguayo jugó en el equipo de Nuñez entre 2014 y 2016, y lo dirigió Julio Lamas y Trifón Poch. En ese lapso, fue parte de la Liga Sudamericana (aportó 5.3 puntos y 3.5 asistencias). El base, luego de ser trascendental en Obras, continuó su carrera en el Galatasaray. Y, desde ahí, se mantuvo firme en la elite europea. Hoy representa los colores de San Pablo Burgos y la Selección de Uruguay.
En una hora de charla junto a las inferiores de Obras, Fitipaldo habló de sus primeros pasos profesionales en Uruguay, su llegada a Buenos Aires y sus hábitos fuera de la cancha, para completar su perfil profesional.
EL INICIO EN EL DEPORTE
“A los 14/15 años comencé a enfocarme para convertirme en un atleta profesional. De a poco fui dando pasos que me colocaron en el lugar correcto para iniciar mi carrera”, comentó el base.
Además, habló sobre la importancia de perseguir objetivos. Se identificó como un jugador que busca constantemente la excelencia, y que este aspecto lo caracterizó a lo largo del tiempo para pulir su crecimiento individual.
LA LLEGADA DE BRUNO FITIPALDO A OBRAS SANITARIAS
“Me llamó Julio Lamas y obviamente no dude. Tenía las mejores referencias del club por Martín Osimani y yo lo seguí”, abrió Bruno.
“Miraba mucho la Liga Nacional y me pareció un lugar perfecto para crecer. El cambio fue muy grande, en la competencia de la liga y la vida diaria. Era la primera vez que salía de mi casa y salí a buscar experiencia”.
Bruno Fitipaldo, entre 2014 y 2016, se convirtió en un jugador clave dentro de la institución. Destacó la capacidad del club para recibir extranjeros, acogerlos y ofrecer un marco ideal para una adaptación instantánea. “Tanto la organización del club, como los compañeros, me facilitaron todo. No me costó nada por ese lado. Sentí que Obras era mi lugar, por su barrio y por la gente”.
PEPO BARRAL Y BRUNO FITIPALDO
A la charla se sumó el ex capitán del club. Pedro, ya nuevo refuerzo del ALM Évreux Basket en Francia, interactuó con su ex compañero e indagó acerca de los hábitos de Fitipaldo fuera de la cancha.
“Con 14 años empecé a hacer trabajo extra. Me daba cuenta que con lo que hacía en los entrenamientos y partidos no era suficiente. Que eso no me iba a asegurar el profesionalismo. Por eso me puse a buscar ese objetivo”, anticipó.
“Busqué un preparador físico y un nutricionista, y empecé a trabajar por fuera. Me di cuenta que necesitaba ganar velocidad y moldear mi físico. Allí aprendí a manejar mejor las comidas”. Asimismo, remarcó la necesidad de no tomar estos hábitos como un sacrificio, sino como una oportunidad para crecer: “Hay que entender que no hay que sufrir 10 años de la vida durante la formación profesional. Hay que priorizar hábitos saludables en la alimentación, y exigentes en los entrenamientos. Hay que sacarse el extremismo de la cabeza. Eso no significa que uno deje de disfrutar de ciertas cosas”.
Por otro lado, habló sobre sus rutinas personales, que le permiten entrenar fuera de hora de manera individual: “Tengo mi propia rutina para esos momentos. Es lo que intento replicar a diario. Provoco mis entrenamientos fuera de hora a partir de errores o falencias de juego”.
Entre otros temas, Bruno Fitipaldo habló sobre las diferencias entre Liga Nacional y ACB, su posición ante compañeros que no poseen su misma metodología de trabajo y adaptación a esto.
La interacción significó una hora de aprendizaje para todos los chicos de las inferiores que pudieron escuchar de un caso de éxito en Europa, que dio sus primeros pasos en Obras Sanitarias.
