El proyecto de formación y desarrollo de jóvenes talentos sigue su curso en Obras. Al caso de éxito de Pedro Barral, que significó su partida al básquetbol europeo para recalar en el ALM Évreux Basket de Francia, se le suma la continuidad de la base de jugadores formados en el club que serán la piedra basal de la temporada 2020-2021 de Liga Nacional.
«Somos un club que forma tanto dentro como fuera de la cancha a nuestros jóvenes proyectos», señaló Horacio Nuñez, vicepresidente de Obras. «Nuestra institución se encarga de brindarle a nuestros chicos y chicas educación en el Instituto Obras y formación con nuestro cuerpo de entrenadores. Me alegra profundamente que continuemos en esta línea y que nuestro equipo profesional esté blindado con el talento de sangre joven con ADN Obras», completó.
Bernardo Murphy, flamante entrenador de Obras para la Liga que se avecina, podrá contar así con el grupo de nacionales que tuvo Gregorio Martínez en la pasada Liga Nacional: Fernando Zurbriggen, Alejandro Zurbriggen, Lautaro Berra, Luca Valussi, Francisco Barbotti, Emiliano Serres y Juan Pablo Venegas, con minutos sostenidos en Liga Nacional, acordaron condiciones y seguirán vistiendo la camiseta del Rockero.
«La partida de Pepo tras su gran rendimiento en la temporada que pasó significa el éxito de un trabajo de años», continuó Nuñez. «Ese lugar vacío será ocupado por otros jugadores de la casa, y ese circulo de riqueza es el que forja nuestra identidad. Obras es presente, pero también es futuro», agregó.
ADN OBRAS: LOS JÓVENES AL PODER
El crecimiento de los proyectos formados en el club fue notable de una temporada a otra, lo que permitió que la base completa del equipo profesional surja de la cantera. El caso más emblemático fue el de Fernando Zurbriggen, oriundo de Santa Fe, quien tuvo un progreso geométrico desde la temporada 2014-15, cuando debutó en LNB a las órdenes de Julio Lamas.
En la pasada campaña, Fernando brilló fuera de la cancha –se recibió de Profesor de Educación Física en el Instituto Obras- y dentro promedió, en 26 partidos disputados, 14 puntos, 4.5 rebotes, 3.2 asistencias y 1.5 robos, con 26 minutos de promedio.
Se espera que, con la partida de Barral al básquetbol europeo, Zurbriggen cobre mayor protagonismo a las órdenes de un entrenador formador como Murphy, capaz de seguir puliendo la gema para que alcance una versión aún mejor de la que ya conocemos.
Por su parte, otra pieza importante que continuará en la institución es su hermano Alejandro, quien ha desarrollado, además de su interesante tiro desde detrás del arco, una importante capacidad defensiva, habilidad que lo convirtió en especialista sin el balón a las órdenes de Gregorio Martínez. El más veterano de los Zurbriggen alteró la posición de escolta y alero, y promedió 6.1 puntos y 3.4 rebotes por aparición.
El chaqueño Luca Valussi, en tanto, tuvo muchos partidos como titular y una evolución notable, tanto en el aspecto deportivo como mental. Valussi jugó 18 partidos y promedió 7.2 puntos y 5.8 rebotes con 57% en T2 y 35% en T3. Su tiro de 6.75 metros desde las esquinas fue una de las armas preferidas del Rockero en la campaña que pasó.
Otro que demostró estar a la altura fue el joven talento peruano Juan Pablo Venegas, revelación merced a su habilidad, velocidad e ingenio para comandar las ofensivas. Con 40% en T3, Venegas, quien será a priori el primer relevo en el puesto de armador detrás de Zurbriggen, promedió, en 21 partidos disputados, 3.7 puntos y 1.5 asistencias por aparición.
Lo mismo ocurrió con el alero uruguayo Emiliano Serres, quien llegó como un proyecto de desarrollo y tuvo estadías importantes dentro de la cancha. Serres, una piedra en el zapato para las defensas por su gran porte físico para la posición, jugó 26 partidos y promedió 5.7 puntos y 3.1 rebotes como hombre equilibrio.
TALENTO EN ALZA BAJO LOS TABLEROS
Finalmente, en la zona pintada, dos jóvenes internos continuarán buscando minutos de calidad en la campaña que se avecina.
El ala-pivote chaqueño Francisco Barbotti, quien se ganó un lugar en la rotación y demostró gran capacidad para pasar el balón y luchar en el apartado rebotero, promedió 2.1 puntos, 3.1 rebotes y 1.1 asistencias.
Por su parte, el centro de Firmat, Lautaro Berra, gozó de una campaña entera saludable y en un puesto difícil para la sangre joven alcanzó números de altísimo impacto: 7.2 puntos y 3.3 rebotes por juego, en 26 presentaciones.
«Buscamos seguir en esta línea de desarrollo sostenido con Bernardo al mando. Queremos que los talentos se formen en nuestra institución y que tengan un lugar en Liga para completar el proceso de construcción de jugadores», completó Nuñez.
Con su base de jugadores definida, el flamante equipo de Murphy se prepara para dar una lucha de calidad y desarrollo en la venidera Liga Nacional.