La Tira Norte de las Inferiores masculinas de Obras Basket sostuvo el compromiso, empeño y motivación en los entrenamientos virtuales. Los jugadores y entrenadores se refirieron a las posibilidades obtenidas gracias a las plataformas digitales en los últimos siete meses.
La U13 se entrena junto con los Preinfantiles de la Tira Centro y las U14 de la cantera femenina. La unión de los equipos en la práctica tiene como objetivo seguir fortaleciendo el sentido de pertenencia hacia el club. Además, compartieron encuentros con otros equipos, mediante las plataformas digitales.
“Esto hizo que, a principios de los entrenamientos virtuales, solo se nos escuchara hablar a los entrenadores. Con el correr del tiempo, los chicos se fueron soltando y hoy en día participan más en las prácticas como un mismo equipo. Por otro lado, las jornadas con otros clubes ayudaron a los chicos, y a nosotros, a ver distintas formas de entrenar. Cuando practicamos con las U16 o con los U15, los chicos conocieron cómo se trabaja en las categorías formativas del club, mucho más tiempo y a más intensidad”, contó uno de los integrantes del cuerpo técnico de la U13, Guido Ranalli.
NO DETUVIERON EL CRECIMIENTO
Los U15 y U17 de la Tira Norte practican de manera conjunta, a través de la plataforma Zoom. Asimismo, aprovecharon esta época para participar de distintas actividades, como encuentros con otras instituciones y competir en los torneos internos.
El DT Mariano Rocco destacó los beneficios de las jornadas virtuales: “En estos 7 meses, el máximo desarrollo se vio reflejado en la técnica individual de los jugadores. Especialmente en los movimientos y mecánica de pies, el desarrollo de las posturas, manejo del balón y las diferentes habilidades ofensivas entrenadas de forma individual. Socialmente pudimos mantener el vínculo, estar presentes para nuestros jugadores desde el día uno. También logramos mantenernos unidos y sostener el dialogo, con un ida y vuelta fluido. Con diferentes variantes estratégicas, planteadas y coordinadas con el staff de formativas, como por ejemplo meriendas y encuentros temáticos, o entrenamientos a cargo de los jugadores”.
Asimismo, el jugador de Infantiles, Yago Larco, resaltó el crecimiento en los aspectos deportivos y sociales. «El cambio más drástico que desarrollé en estos siete meses fue mi técnica de tiro. Por suerte tengo un aro en mi casa y estoy muchas horas diarias tirando. Otro punto fueron los movimientos de pies en el uno contra uno debido a que, por el tema del espacio, me enfoqué en adquirir la máxima cantidad de recursos individuales. Afortunadamente, nos llevamos muy bien entre nosotros y, además de vernos virtualmente tres veces por semana, jugamos a la play juntos y salimos a andar en bici. Creo que la pandemia hizo valorarnos más y reforzar el vínculo en el grupo», manifestó.
En tanto, el integrante del plantel de Cadetes, Lautaro Pagés, añadió: «Los certámenes internos fueron muy buenos porque, al no poder competir personalmente, pudimos hacerlo por zoom entre nosotros. Me divertí mucho en los torneos que jugamos, y también me gustó competir».
EXPERIENCIAS PARA REFORZARSE EN EL FUTURO
A su vez, el coach de los U19 de la Tira Norte, Sebastián Bracco, comentó sobre los resultados cosechados por medio de prácticas dadas por los mismos Juveniles y los torneos internos de las formativas. «Fue muy positivo, ya que había chicos de 14 años interactuando con chicos de hasta 22. Y en cuanto a los entrenamientos, fue excelente la disposición de los chicos porque les ayudó a pararse frente a sus compañeros y a chicos de otras categorías para dar un bloque de ejercicios y hacerles correcciones», expresó.
Por su parte, Mateo Weinstabl enumeró los puntos a alcanzar de cara a fin del 2020: «Sabemos que falta mucho para volver a jugar, así que el objetivo de todos es progresar individualmente lo más que uno pueda. Y, con la próxima vuelta al club, esperamos agarrar un poco más de ritmo e intensidad de la que teníamos en nuestras casas».