La desazón está latente en la cara de Marcos Delía. La derrota ante Boca golpeó y el interno aurinegro, consciente del flojo nivel del equipo, trata de explicar este momento y anticipa el choque de esta noche frente a Lanús.
-Volvieron a caer en el final del partido y se quedaron con las manos vacías. Es una situación que se viene repitiendo.
-Sí, en los últimos tres partidos de la Liga nos pasó lo mismo. Sacamos una diferencia de 10 o 15 puntos pero terminamos perdiendo los partidos. La verdad es que estamos muy calientes.
-Da la sensación de que todo lo bueno que construyen en 10 o 15 minutos lo desperdician en muy poco tiempo. ¿Por qué pensás que se da esto?
-No sé bien cuál es el problema. No me puedo apresurar a dar una causa. Puede ser que haya algo de desconcentración que nos lleva a tomar malas decisiones. Pero bueno, habrá que trabajar sobre eso y madurar como equipo.
-¿Cómo creés que pueden modificar este tema?
-Creo que nosotros sacamos la diferencia jugando bien e intenso, entonces tenemos que tratar de mantener eso por más tiempo, sin perder el foco.
-¿Por dónde pasó la derrota con Boca?
-Ellos defendieron bien y tomaron rebotes ofensivos. Boca es un equipo que mete muchos triples y cuando tiene segundas chances de gol te liquida.
-El partido de esta noche contra Lanús puede ser una buena oportunidad para que el equipo levante cabeza. Sabiendo que perdieron los últimos dos choques ante este rival, ¿qué deben tener en cuenta para que el resultado sea distinto?
-Necesitamos ganar, no podemos regalar más nada porque ya lo hicimos bastante. Tenemos que entrar duros, concentrados y tratar de contener en defensa principalmente a Wade y Romano, sus mejores jugadores.
FUENTE: Emilio Hamilton para Prensa Obras Basket