Los chicos de Obras Basket comenzaron la Liga de Desarrollo de menos a más y esto quedó plasmado en la tabla de posiciones. Con 12 victorias y diez derrotas, el conjunto dirigido por Santiago Petersen se retiró de la competencia con un sabor dulce, en conocimiento que las expectativas fueron superadas y quedaron con un promedio de 85 tantos por juego. Los jóvenes sumaron experiencia de cara a la nueva temporada, ya tomaron carrera para comenzar la actividad regular y, sobre todas las cosas, compartieron anécdotas junto al plantel profesional de la institución.
Si bien no llegó a ubicarse en el pelotón de arriba, el aurinegro apostó a sus promesas con un grupo promedio de 18 años, como destacó su base Fernando Zurbriggen: “Como aspecto positivo, noté que, con un promedio bajo de edad, le pudimos jugar de igual a igual a todos los equipos y, en algunos casos, hasta vencimos a los candidatos del torneo. Además, los chicos tuvieron en claro el objetivo del torneo y creo que todos salieron beneficiados con esto, fueron bastante maduros en ese sentido”.
Por otra parte, el centro Lautaro Berra cree en este grupo y en su desarrollo: “La realidad es que al equipo le falta más entrenamientos juntos, lo cual no pudimos hacerlo en lo que fue la Liga de Desarrollo. Igualmente tenemos que estar tranquilos porque el mismo equipo o la mayoría vamos a competir en las formativas este año y a medida que pase el tiempo vamos a entrar todos en una buena sintonía. Y así, vamos a estar mucho más cerca de cumplir los objetivos que se nos presenten durante las diferentes competiciones”. Obras tuvo grandes pruebas de actitud ante conjuntos como Instituto, de local, segundo en la Zona Norte, y también le dio batalla a Bahía Basket en el Templo del Rock.
El conjunto de Núñez contó con bajas importantes en el ciclo del certamen, como la lesión del ala-pivote Santiago Ibarra, las ausencias de Francisco Barbotti, Federico Corbalán y las convocatorias en el sprint final al seleccionado argentino de Berra y Luca Valussi, que obligaron a Petersen a implementar las alternativas en sus presentaciones. Con respecto al desenvolvimiento del equipo, el entrenador está conforme con la proyección que ofrecieron: “Fuimos mejorando partido tras partido y estoy muy conforme con el desempeño de los chicos, porque crecimos como equipo y esto me deja un balance muy positivo. En un torneo de nivel como este, nosotros apostamos al desarrollo de los jugadores, donde fuimos competitivos siempre”.
El conjunto aurinegro contó con seis jugadores por encima de los diez puntos por partido, es el caso de Zurbriggen (17), Berra (15), Santiago Ibarra (14), Valussi (11), Tomás Cocha (11) y Barbotti (10). El base santafesino fue líder en varios aspectos del juego, no sólo fue el máximo anotador, sino también redondeó nueve rebotes y cinco asistencias en 32 minutos de juego.
En el recuento de momentos y partidos disputados quedan más aspectos positivos que negativos. Esto llevará a una maduración en el transcurso de la temporada, donde los planteles de Obras Basket ya comenzarán con la actividad local en cuestión de horas y esta experiencia de desarrollo grupal e individual fue un aventón anímico para encarar las competencias que tienen por delante.