Si hay algo que el Club Obras fomenta todo el tiempo, es la combinación del estudio con deporte. Fernando Zurbriggen es un claro ejemplo de superación. A meses de recibirse como Profesor de Educación Física, el base rockero está convencido de que el estudio contribuye con el crecimiento del jugador.
Zurbriggen, oriundo de Santa Fe, se recibió en el secundario del Instituto Obras e inmediatamente comenzó su camino en el Profesorado de Educación Física. “Principalmente, cuando empecé la carrera existía el “tabú” de que no eran compatibles un deportista de alto rendimiento deportivo y una carrera convencional. Me lo plantee como un desafío y sin lugar a duda lo fue”, dijo Fernando.
El referente del conjunto de Gregorio Martínez está en la recta final de su carrera. A pocos meses de recibirse, tiene claro que no lo podía haber logrado solo a los 22 años. “El entorno y el apoyo de la gente del club, y el hecho de tener una continuidad de temporadas jugando para Obras, me permitió hacer la carrera en tiempo y forma. Estoy en la recta final y es el año que más estoy disfrutando, porque hago introspección propia de cómo me tomaba presentarme a un examen al principio y ahora voy más seguro. A su vez, me siento cómodo debido a que los directivos de la Institución y los profesores me hacen sentir que contemplan mi situación, y yo creo que a cualquier persona en diferentes ámbitos les va a ir mejor si tenes gente que te apoya al lado», resaltó.
Zurbriggen tiene un carisma y una personalidad avasallante, pero también existen momentos de bajones como todo ser humano. “Pienso que la fortaleza más grande que tengo es que, cada vez que yo no estoy en un buen momento, siempre hay alguien desde la gente de cocina, amigos que he forjado en el transcurso de todos estos años en el club, que saben que realmente me gusta la carrera y me apoyan en lo que estoy haciendo. Desde ya, tiene un desgaste físico, es exigente a la hora de sentarme a estudiar y también me genera muchas emociones y sensaciones que solamente son académicas, el aprobar un examen, el de promocionar una materia o hacer la residencia que es la etapa final en el Jardín de Obras», aclaró.
El santafesino sabe que sus compañeros de curso tuvieron mucho que ver en su trayecto. “Quiero mencionar y agradecer a mis compañeros de curso, que en estos años fueron pilares fundamentales para que yo avance en la carrera. Mis ausencias por los viajes con el equipo, sino fuera por ellos, no lo podría haber logrado”.
ESTUDIAR AYUDA A QUE SEAS MEJOR JUGADOR
A la hora de destacar en qué suma estudiar para el deporte, Zurbriggen señaló con claridad: “Personalmente pienso que los deportistas de alto rendimiento, cualquiera sea la disciplina, vivimos en una burbuja. El hecho de estudiar, de compartir un ambiente con otras personas, de ver distintas realidades, no solamente te abre la cabeza para ver qué pasa fuera de “esa burbuja, sino que además te ayuda a evaluar situaciones cotidianas en diferentes perspectivas. En síntesis, el estudiar me permite crecer, no solo en lo intelectual para después resolver cosas mismas del juego, para poder identificar ventajas o sistemas, sino también como persona. Después de estos cuatro años, yo noto un crecimiento gigante y es gracias a todo el entorno que me rodea».
DENTRO DE LOS MEJORES PROMEDIOS
En su último año de carrera, el base aurinegro se encuentra dentro de los mejores tres promedios del curso. “Me gusta mucho la carrera. Me seduce la información propiamente dicha de las materias, me interesa ir a clases, escuchar a los profesores y además está el plus de que soy una persona que me exijo primero a mí mismo, como también exijo a los demás y por eso obtengo estos resultados. Tengo la filosofía de que no estudio por la nota, sino por el conocimiento. Ya sea en un viaje en micro o en avión, siempre tengo mis apuntes a mano, en el viaje a que se avecina a España con el equipo llevaré las tesis que voy a leer para mis exámenes finales. Todo el tiempo tengo una actividad extra al deporte que me genera un crecimiento y eso es lo que es la carrera en mi caso.
