Pipa Ríos, director técnico de la categoría U13 aurinegra, reflexionó sobre la actualidad de su equipo y sobre lo que significa estar al mando de un equipo en plena formación.
¿Qué evaluación haces del año?
El balance siempre es positivo. Partimos de la base que hay muchos chicos que directamente se inician en el deporte con nosotros y eso siempre suma. En el caso de los chicos que ya estaban, en la mayoría vimos una mejorar individual muy marcada.
¿Cuánta importancia le das a la parte de inculcar los valores, el fairplay, además de trabajar en el juego?
Nuestra preocupación es el desarrollo psicológico. Nosotros como entrenadores podemos darle muchos consejos técnicos, pero la verdadera mejora se va a encontrar cuando ellos mismos decidan por su cuenta ir a ver partidos, tirar al aro en tiros libres, etcétera. El trabajo más importante es inculcarles el deporte de manera que puedan querer ampliar su conocimiento en todo momento
¿Cuáles son las aspiraciones del equipo?
Siempre el objetivo es desarrollar el grupo y luego como personas. Aparte de eso, tanto en equipo como en individual, queremos que se sientan deportistas y esten formados para en un futuro jugar al básquet de manera profesional.
¿Cuáles son los puntos a mejorar y los que ves que rápidamente se entendieron?
Queremos seguir incentivando el juego en equipo, el compañerismo y carácter. Esto último tiene más que ver estrictamente con el juego, pero nunca dejamos de lado el respeto para con el rival, árbitros e integrantes de cada plantel.
¿Disfrutas ser técnico de un equipo tan joven?
Disfruto cada día, es mi gran pasión. Es un placer porque ellos están tan abiertos a aprender que da gusto enseñar. Cada vez que hablas ellos te copian y te quieren seguir. También es una gran responsabilidad, pero es algo muy lindo y que siempre lleva un desafió.
