La temporada 2017/18 de Obras Basket en la Liga Nacional fue muy positiva. Es que cosechó un récord de 20 victorias y 18 derrotas. Asimismo, se potenció el nivel de Fernando Zurbriggen, Luca Valussi y Lautaro Berra, pertenecientes a las inferiores del club.
Ahora, el entrenador Gregorio Martínez dejó en claro que se intentará superar la campaña anterior, respetando el proyecto que se está llevando adelante en el conjunto aurinegro: conservar el ritmo de juego intenso y darle prioridad a los surgidos en el semillero.
Con respeto al trabajo durante la postemporada, ¿Qué aspectos consideraron positivos y cuáles creés que hay que mejorar?
– Es la primera vez que estoy haciendo una postemporada y el segundo año consecutivo que se desarrolla en el club. Lo que se busca trabajar son aspectos individuales de los jugadores, tanto físicos como técnicos. Se realiza un diagnóstico sobre cada uno y se lo mejora en algo específico. También, se lleva a cabo una descarga física para hacer un trabajo específico de cada jugador.
Fueron cuatro semanas positivas porque nos vinieron muy bien y lo supimos aprovechar.
¿Cómo van a encarar la pretemporada para luego cumplir los objetivos en la 18/19?
– La pretemporada es una continuidad de la postemporada que hicimos. Al tener muchos jugadores con continuidad, podemos seguir con el trabajo. El haber realizado esto hasta hace dos semanas atrás, permitió que hayamos ganado tiempo para que se logre un emparejamiento físico con el resto de los jugadores.
En este tiempo, varios integrantes estuvieron disputando los campeonatos metropolitanos (Liga de Desarrollo FeBAMBA, Primera Capital). Ayuda con la evolución que están buscando…
– Por supuesto. Hay muchos de ellos que van a estar en el plantel de la Liga Nacional. Vamos a tratar de darle oportunidades a los que vienen de jugar con Villa Mitre. Hay varios que cuentan con mucho protagonismo. Son jugadores que pertenecen a la cantera profunda, es decir, empezaron a partir de los quince años, aproximadamente.
En el Súper 20 del 2017, el equipo se quedó cerca de superar la primera ronda. Teniendo en cuenta cómo fue la fase regular 17/18. ¿Cambiaron las expectativas para el torneo de este año?
– Veremos cómo llegamos nosotros, además de que los rivales juegan en esto. El equipo tiene una base de la temporada anterior, si bien es muy joven. Las expectativas siempre están, competir de la mejor manera y desarrollar a los jugadores. Somos optimistas, pero sabemos también que en la zona va a haber equipos muy buenos.
Por otro lado, tenemos que ver hasta dónde podemos llegar y enfocarnos en el crecimiento de los jóvenes. Vamos a arrancar el año con cinco mayores y el resto, Sub 23 y juveniles. Es un hecho importante a tener en cuenta, sin resignar nada porque somos ambiciosos.
Para la próxima campaña, ¿Cuál sería el objetivo principal, teniendo en cuenta los resultados a conseguir y el proyecto de seguir dándole espacio a la cantera?
– En cuanto a los resultados, queremos competir siempre. Cuando la pelota va para arriba, buscamos ganar cada partido que juguemos. (Pero) nosotros tenemos un objetivo deportivo, que es el que ya mencioné antes.
Ojalá podamos repetir el transcurso. Durante la temporada pasada, el equipo logró cosas fundamentales, como no perder tres partidos seguidos en fase regular, ni tener récord negativo, ni estar por debajo del décimo puesto. Ese recorrido lo hizo muy bueno, ya que a veces uno llega a la misma posición pero, por ejemplo, terminaste 14° y ganaste dos partidos de playoffs. El mérito fue finalizar entre los primeros ocho lugares, sin grandes sobresaltos.