Las Inferiores femeninas volvieron a disfrutar de una nueva jornada del torneo interno de la cantera rockera. Las formativas de Obras culminaron la primera mitad del certamen, debido a que restan dos jueves más de la primera edición.
Hay que recordar que la competencia está dividida en dos equipos: amarillo y negro. En cada juego hubo dos instancias, ya que en la segunda vuelta estaban las tres jugadoras que más repeticiones completaron en la primera. La ganadora de la segunda serie recibía un punto para la tabla grupal y uno para la individual, debido a que al final de cada jornada se entrega el premio al MVP.
LA CRÓNICA DE LA JORNADA
El preparador físico Facundo Veloso inició una nueva tardel del torneo interno con fajas con un par de medias y el pecho inclinado a 45 grados. En la siguiente actividad se siguió utilizando el par de medias, con el fin de tirar al aire con una mano y agarrarla con otra (en postura de plancha). Después se realizaron abdominales para tocar con el bollo los pies y a cierta altura. El cuarto ejercicio consistió en hacer sentadillas a la vez que se lanzaba el elemento hacia el aire y se agarraba sin que se caiga. Asimismo, se volvió a arrojar las medias hacia arriba, pero con la diferencia de que había completar dos giros de 180 grados en el medio.
Otro desafío fue desplazarse lateralmente en postura de fuerza de brazos, manteniendo el par encima de la espalda. Luego se tuvo que tocar con una mano la rodilla contraria, con la misma postura y el mismo lugar para el bollo que en la actividad anterior. A continuación, se combinaron sentadillas con tocar el suelo con las manos y saltos en extensión. Y en la última parte del físico se llevaron a cabo las estocadas.
En el segundo bloque, el coach Mitchael Saldaña hizo hincapié en mezclar los cambios de dirección, con el pique entre piernas y las fajas. El ejercicio posterior fue desarrollar el dribbling a la vez que se despazaban lateralmente. Ayelén se encargó del tercer tramo, que comenzó con un cambio de dirección mientras se sacaba una botella de la silla y dejarla en el piso, y otro cambio para volver a ubicar dicha botella en su lugar original. Después se realizó la misma modalidad, pero se modificó el cambio de dirección por el pique entre piernas. También, se emuló el formato del desafío para reemplazar los piques entre piernas por fajas.
Más tarde, el DT Francisco Pirani llevó adelante un juego de movimientos laterales en postura defensiva. Seguido de la formación de un cuadrado con cuatro conos, con el objetivo de continuar puliendo los desplazamientos defensivos. Además, se recurrió al tiro hacia el cesto, con la condición previa de realizar una faja hacia arriba para agarrar la pelota pequeña con la otra mano. Luego se intercambió la condición por el equilibrio con ambas piernas en el aire, en el afán de pasar la bola por debajo y sujetarla con la otra mano. Finalmente, había que sostener el dribbling en el mismo momento que se tiraba el mini balón al cesto.
A estos ejercicios, Pirani le agregó una prenda física para las jugadoras que hacían la menor cantidad de repeticiones en la primera vuelta. Debían cumplir con la prenda durante el tiempo que transcurría la segunda serie.
EL MARCADOR PARCIAL EN EL TORNEO INTERNO
El equipo amarillo se mantuvo como líder en la competencia con una ventaja de 30 a 15 sobre el elenco negro. En esta tercera fecha, el conjunto que va al frente sumó 11 puntos contra 6 del oponente. Por otro lado, Agustina Sansone se quedó con el segundo premio consecutivo al MVP de la jornada, luego de conseguir ocho unidades.
«Me lo tomo con alegría. Somos un equipo competitivo, y hasta ahora la lucha por el MVP viene muy peleada. Ganarlo hoy me dio más ganas para seguir compitiendo la próxima. Creo que es una linda forma de mantener ese espíritu competitivo que necesitamos en el momento de jugar al básquet. Y a pesar de las circunstancias en las que estamos, seguir superándonos a nosotras mismas», expresó Sansone.
En tanto, manifestó sobre la posibilidad de compartir este torneo interno con sus compañeras: «El certamen es muy bueno. No solo competimos, sino que también nos reímos un rato y disfrutamos todas juntas que es lo más importante. A mí particularmente me gustan las actividades de dribbling. Al encontrarnos todos estos meses en lugares reducidos, fue el tipo de ejercicio al cual le pude encontrar más variedad para no aburrirme e incorporarlo de distintas formas en mis rutinas».
