Las Inferiores femeninas de Obras Basket realizaron un entrenamiento compartido con Talleres de Paraná. Es la segunda vez que las formativas rockeras participan de un encuentro virtual con un club de otra provincia.
Anteriormente, el Minibásquet aurinegro había organizado una práctica por Zoom con el conjunto de Entre Ríos. En esta ocasión, la cantera femenina tuvo su turno de abrir conexiones mediante las plataformas digitales.
Anna Giorgio, reclutada por el conjunto de la Avenida Libertador, se refirió a la posibilidad de volverse a ver con su equipo anterior. «Fue una gran posibilidad de ver a chicas con la que compartí equipo y prácticas en mis últimos años en Paraná, así como también a mi ex DT José Guide», afirmó.
Además, la jugadora de las Inferiores de Obras, Génesis Toledano, agregó: «Significó una experiencia diferente, con otro club que tiene sus diferentes formas de entrenamiento».
LOS HECHOS DEL ENTRENAMIENTO
El preparador físico Facundo Veloso abrió la jornada con ejercicios de elongación, fuerza abdominal, rodillas al pecho, estocadas y repiqueteo. Luego, uno de los integrantes del cuerpo técnico de Talleres de Paraná, Marcos Ramos, se encargó de profundizar los movimientos defensivos.
A continuación, el coach de las U21 y Liga de Desarrollo Femenina, Francisco Pirani, hizo hincapié en la técnica del dribbling. Seguido de actividades con el objetivo de disociar la atención al pique de balón (con una pelota de tenis o par de medias), llevado a cabo por Ayelén Cortez (entrenadora de las U14 aurinegras). Después, Pirani guió un tramo destinado al trabajo del dribbling y cambio de dirección. También, Cortez le dedicó otro bloque al desvío de atención a la naranja, con los mismos materiales que antes.
El DT de las U18 del club de Núñez, Mitchael Saldaña, le dio un cierre a la jornada en conjunto con Talleres de Paraná, enfocándose en las fintas, salidas, recepciones y movimiento de pies.
SIN PAUSAS PARA LOS ENCUENTROS
Arrancó la segunda parte del 2020, pero las Inferiores femeninas de Obras no se tomaron recesos de los entrenamientos compartidos. La posibilidad de trabajar lo deportivo y social permitió que las jugadoras conserven un ritmo de práctica, compromiso y comunicación.
«Individualmente, el manejo de la pelota fue un aspecto deportivo en el que he mejorado. Colectivamente, es lindo no perder el contacto con el grupo y ver que todos están dispuestos a participar de las actividades, pese a las adversidades. Y socialmente, en interactuar con clubes de otros paises y otras provincias que tienen su propia cultura, además de formas de entrenamiento y de expresarse», señaló Génesis Toledano.
En tanto, Anna Giorgio añadió: «Es difícil de decir porque los progresos se ven en la cancha, y hasta ahora en mi ciudad sigue prohibido entrar a una cancha de básquet. Pero, con el transcurrir de las practicas virtuales, puedo decir que voy dominando más los drills los voy dominando, ya que cuando más los practicás, más los adquirís. Tengo la ventaja de contar con un aro en casa, entonces no es solo la ejecución de movimientos, sino también la conclusión».
Asimismo, se refirió a la parte social y grupal: «Por esta circunstancia de tantos meses aislados, todas nos tuvimos que acostumbrar a una nueva manera de relacionarnos y tratar de apoyarnos cuando alguna de nosotros estaba bajoneada. Por suerte, estoy en mi casa con mis padres y mi hermano, pero son demasiados meses de anormalidad».