Seguinos

Formativas

El paso de cuatro integrantes de la cantera de Obras en Brasil

González Larco Acevedo Giralt Brasil

Hace aproximadamente un año, cuatro jugadores de las Inferiores de Obras formaron parte del exitoso paso de FeBAMBA en el Encuentro Sudamericano de Básquet. Ezequiel González, Matías Acevedo, Yago Larco y Bautista Giralt se llevaron una experiencia enriquecedora de Novo Hamburgo (Brasil).

El seleccionado metropolitano presentó dos equipos para el certamen, uno de U14 (González y Larco) y otro de U15 (Acevedo y Giralt). Ambos elencos levantaron su respectivo trofeo tras lograr un camino perfecto (100% de efectividad en victorias). Además, se la segunda conquista consecutiva de la competencia por parte de las dos categorías, midiéndose ante rivales de gran nivel (BNB Clube de Fortaleza, San Pablo FC y Pinheiros).

“Lo primero que se me viene a la cabeza son los últimos segundos previo a que salgamos campeones, ya que fue una sensación de alivio al poder finalmente conseguir el objetivo después de tanto esfuerzo”, contó Ezequiel González.

González Larco Acevedo Giralt Brasil

También, Yago Larco añadió: “La imagen que tengo es la del equipo, mirándonos entre nosotros y escuchando a todo el estadio hinchando por Brasil. Sabíamos que iba a ser un partido difícil, pero que confiábamos mucho en nosotros e íbamos a salir a dar todo”.

LOS RECUERDOS IMBORRABLES

No solo se trató de adjudicarse el primer puesto del torneo. Los integrantes de la cantera rockera entendieron que significó una oportunidad de acumular una experiencia internacional. Esto contribuye con el desarrollo del jugador que se encuentra en plena etapa formativa.

“Uno sabía que era una oportunidad diferente cuando juega fuera del país. Y eso fue lo que más disfruté, competir con equipos de otras naciones de igual a igual”, manifestó Matías Acevedo.

Por su parte, Yago Larco agregó: “Lo que más disfruté fue la adrenalina y el ambiente que se vivía en cada partido. Estábamos de visitante y eso nos ayudó a complementarnos y ayudarnos entre nosotros para jugar lo mejor posible”.

Otro aspecto fortalecedor tuvo que ver con la parte humana. Es que la estadía en Brasil duró casi una semana de las vacaciones de invierno, por lo tanto implicó un tiempo de convivencia con los compañeros de equipo. Así que los chicos aprovecharon el momento para aprender a transitar un camino de forma colectiva.

«El tiempo afuera de la cancha lo disfruté en todo momento, desde que nos subimos al micro hasta que nos bajamos la otra semana. Estábamos en un complejo muy grande con otros chicos, así que nos poníamos a jugar, charlar, intercambiar cosas y conocer culturas nuevas. Nos divertíamos mucho, pero conscientes de a lo que íbamos», aseguró Acevedo.

Mientras que González destacó: «Fuera de la cancha, me gustaba poder conversar mucho con chicos de diferentes equipos. Aunque el idioma complicaba la charla, era interesante. Y luego, el divertirnos con los chicos en la sede o cuando salíamos a hacer algún recorrido».

FORTALECIDOS DE LA PARTICIPACIÓN

«De este torneo fue del que más aprendí. Fortalecí el juego bajo presión, la relación con mis compañeros, mejoré mucho mi juego tácticamente y del uno contra uno. Y lo más importante que aprendí fue que estábamos al nivel de los mejores, si el equipo estaba unido», afirmó Larco.

Cada uno se llevó un concepto del viaje que le permitió avanzar pasos en el semillero rockero. «Personalmente, me ayudó muchísimo a mi maduración, debido a que fui solo y, a veces, si no estaba satisfecho conmigo debía darme cuenta de mis errores e intentar merjorarlos. Deportivamente, si llegamos a ir al torneo es porque estábamos, pero el poder defender o jugar contra mejores jugadores me hizo saber que debo mejorar para poder entrenarlo», señaló González.

 

Videos

Facebook

Más en Formativas