Obras Basket tuvo una gran fase regular de la Liga de Desarrollo Femenina porque finalizó primero con un récord de once victorias y tres derrotas. Para eso, la entrenadora Adriana Amado contribuyó con buenos resultados en las categorías (U19 y Primera A) que componen dicho equipo.
La DT brasileña arribó a la institución de Núñez a mediados de marzo, con el objetivo de aportar sus conocimientos en el progreso de las jugadoras jóvenes. “Cuando llegué, hablaba muy poco español, por lo tanto era más difícil de comunicarme y las chicas no entendían mucho. Pero después lo fui cambiando y ellas se acostumbraron con mi manera de entrenar. Y yo también aprendí cómo se maneja el básquet acá. Entonces, creamos una intimidad mayor”, aclaró.
El primer obstáculo fue superado, y de la mano llegaron los triunfos. Con buenos desempeños en la primera mitad del año, las Juveniles concluyeron la primera fase de la AFMB de forma invicta (6-0). Ahora, llevan un récord positivo en la segunda etapa, con tres triunfos y dos caídas.
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Existe un hecho alentador para la evolución de la cantera aurinegra. “Se agregan jugadoras de U15 y U17, que son prospectos y pueden sumar. Ellas suelen entrenar juntas, y algunas llegan a estar con las de la Liga, lo cual suma un montón porque aprenden de la experiencia de las Mayores y ganan ritmo. Al principio, hicimos una especie de pretemporada, enfocándonos en la intensidad y la defensa. A esa buena base de trabajo, se añadieron los fundamentos que trabajamos con Francisco (Pirani) y Rossana (Venticinque)”, explicó Amado.
EN CONTACTO CON LA PRIMERA
Varias integrantes de las inferiores forman parte de la Primera Norte A, junto con jugadoras de la Liga Femenina, como Belén Echeverría, Johanna Puchetti y Bárbara Landro. El equipo se consolidó en la primera mitad del año, ganando doce de los trece encuentros disputados por el torneo de la Capital.
“Es una experiencia bárbara y muy importante, porque las de U15, U17 y U19 juegan con varias de la Liga. Nosotros tenemos muchos partidos en las distintas categorías, por ende las chicas están todo el tiempo en competencia. Pero que estén con las jugadoras de Primera es una oportunidad que tienen que aprovechar al máximo”, destacó la entrenadora de la categoría.
ESTABLECIENDO UN ESTILO
Amado se refirió a la identidad de juego que ayuda a generar en el Rockero: “Significa tener un ritmo intenso, defender consistentemente y dejar todo en la cancha. Después, me importa mucho que ellas convivan. Es algo que se entrena día a día para que, cuando un partido está peleado, una motive a otra a dar el máximo esfuerzo. Por ejemplo, en el inicio de la Liga de Desarrollo, ganamos dos encuentros en tiempo suplementario. Así que buscamos que el equipo tenga confianza en sí mismo, respete la unión y al adversario, y haga lo mejor todos los días“.
Todo este proceso tuvo como consecuencia el liderazgo en la fase regular de la Liga de Desarrollo Femenina. Con la mira en la semifinal contra Vélez, Obras Basket luchará por el campeonato, siguiendo el camino transitado en este 2018.
“Todos los equipos eran muy duros y parejos. Entonces, nos comprometimos a poner nuestro mayor empeño. A partir de la derrota con Las Heras, comprendimos que teníamos que dar lo mejor de nosotras. Ganamos varios partidos seguidos y perdimos solo dos (Deportivo Berazategui y Vélez). Sin embargo, eso nos ayudó a crecer un poco más. También, superamos las lesiones (Rodriguez Biré y Sabater) y las ausencias por la Selección (Bereilh).
Eso me deja orgullosa porque entendieron la esencia de jugar en equipo. Ahora, creen en sí mismas y quieren dar los últimos dos pasos, pero seguimos haciendo nuestro trabajo para cerrar el torneo de la mejor manera”.