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Diego Ricci en el Maxibásquet

Diego Ricci referente y capitán que tuvo Obras Sanitarias en sus años de formación y en la Liga Nacional, volvió a las pistas y es parte del equipo de Maxibásquet aurinegro: “Representar la camiseta de Obras es todo un orgullo. Somos una institución importante y todo el grupo la representa con competitividad y respeto”, dijo el interno.

Actualmente, en conjunto con el trabajo que preside Fabián Borro, Ricci es el coordinador de las inferiores de Obras Basket, donde juega su hijo mayor Tomás, y sigue al equipo de la Liga Nacional junto con su familia. “El amor por la camiseta lo voy a llevar siempre, porque me sigue pasando cuando me pongo la de veteranos. Es un club donde se respira básquet y siempre se trabajó con mucho sacrificio”, se emociona Ricci al definir la pasión, que comparte con sus hijos, por ese lugar que lo vio crecer.

-¿Qué significa volver a vestir los colores de Obras Basket?
-Para mí es todo un orgullo. Después de estar inactivo durante muchos años, volver a jugar en el club que me siento identificado, y junto con amigos, es emocionante. Somos una institución importante y como tal la estamos representando con mucho respeto y competitividad.

-¿Cómo surgió la idea de que seas integrante del equipo de Maxibásquet?
-Ya desde el año pasado me vienen insistiendo. Un poco lo dudé, sobre todo por temas laborales, pero por otro lado necesitaba empezar hacer una actividad física. Este año se armó un equipo prácticamente nuevo con jugadores que están identificados con el club porque trabajan en la institución. Eso es muy positivo porque es un espacio para también unir lazos y poder hablar de cuestiones del club. Normalmente luego de cada partido nos vamos todos a cenar.

-¿Seguís teniendo esa adrenalina cuando entrás a la cancha?
-(risas) Eso no se pierde nunca. Creo que con el tiempo al ser más maduro pensás mas las cosas, pero la adrenalina siempre está. Uno siempre fue competitivo y en el Maxibásquet hay buenos equipos, algunos se entrenan, otros lo toman más como algo recreativo, pero físicamente hay que estar bien con los controles que pide FEBAMBA. A su vez, pienso que es una categoría que le da importancia a jugadores que tienen ganas de seguir compitiendo a pesar de la edad. Si uno ve algunos equipos, hay jugadores que han pasado como yo, por la Liga Nacional.

-¿El equipo se propuso algún objetivo para este año?
-El equipo lo único que se propuso es hacer las cosas bien. Sabemos que es una categoría competitiva y deberíamos entrenar más pero a veces se complica por temas personales de cada uno. De todas formas, el grupo está bien físicamente. Si bien cuando la pelota empieza a rodar todos queremos ganar, siempre lo hacemos con el mayor respeto y competencia sana.

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