Joaquín Rodríguez volvió a ser protagonista de una ventana FIBA con la Selección de Uruguay, que ya se aseguró la clasificación a la próxima ronda. El guardia rockero fue una ficha prácticamente fija en las últimas convocatorias de Rubén Magnano, y esta última no fue la excepción para un jugador que sigue creciendo en el ámbito local, y que sigue mostrando sus condiciones en el plano internacional.
La Celeste tuvo dos desafíos interesantes en esta doble fecha. El primero, el más duro de ellos: enfrentar a Brasil. Fue victoria para la Verdeamarela por 85 a 66, con un conjunto uruguayo al que le costó anotar, y con apenas un jugador en doble dígito de anotación. Joaquín no pudo conseguir puntos, en un encuentro complicado con el aro (0/6 en tiros de campo), pero aportó 4 rebotes. Necesita puntos, es su principal virtud, y su revancha llegaría pocos días después.
El duelo contra Chile era importantísimo: aun no se habían enfrentado y, en caso de ganar, Uruguay se aseguraría un lugar en la próxima instancia de los Clasificatorios para la Copa del Mundo de 2023. Entonces, los de Magnano hicieron los deberes y sacaron una leve diferencia en el primer cuarto, con una buena actuación en el costado defensivo, para luego sostener la ventaja y quedarse con la victoria 78 a 67.
¿Rodríguez? Mejoró considerablemente, en línea con todo el equipo. Se subió al podio de los anotadores del plantel y terminó con 11 puntos, 3 rebotes, 1 asistencia y 1 tapa en casi 25 minutos de juego. Así, terminó la ventana con una sensación totalmente positiva, y con la tranquilidad del primer objetivo cumplido: clasificar a la siguiente instancia, incluso con dos fechas de la primera ronda aun por jugarse.
¿Importan esas dos jornadas restantes? Claro que sí. Los puntos de toda la primera fase se arrastran a la siguiente, que define a las siete selecciones mundialistas. Entonces, Joaquín y los suyos, que cuentan con récord de 3-1, tendrán la chance en junio/julio de terminar el Grupo B de la mejor manera cuando enfrenten a Brasil y Chile nuevamente.
Las 11 unidades del jugador (y uno de los goleadores) de Obras fueron su máxima en este clasificatorio con su Selección. Promedia 5 puntos, 2,5 rebotes y 1,3 asistencias en los 4 partidos que disputó con Uruguay en busca de una boleto en la Copa del Mundo 2023, y va por más.
