Las autoridades de Obras Sanitarias lamentan profundamente el fallecimiento del profesor Emilio Gutiérrez a los 63 años de edad.
Emilio, conocedor de los pasillos de nuestra institución y su rica historia, fue quien llevó a cabo el libro del centenario del Club (1917-2017).
El profesor Emilio Gutiérrez no solo fue un extraordinario entrenador de básquetbol, sino que por encima de eso fue una persona querida, respetada y apreciada dentro del deporte capitalino primero y nacional después.
Su partida deja un vacío irremplazable en el corazón de todos los que amamos este deporte. Nacido en Buenos Aires y diplomado como profesor nacional de Educación Física, tuvo un enfoque único para la formación, tal es así que se desempeñó hasta el día de la fecha como Director de Básquet Escolar en la CAB (Confederación Argentina de básquetbol).
Además de sociólogo, Emilio fue uno de los grandes historiadores que dio el básquetbol de nuestro país. Todas las fechas, todos los jugadores, todos los equipos, pasaron por el tamiz de su lupa. La profundización del dato, la contextualización del hecho y la precisión fueron sus mandamientos primarios a la hora de desenvolverse en su actividad diaria.
Graduado en Licenciatura en Sociología en la Universidad de Buenos Aires (UBA), dictó clases de manera ininterrumpida desde 1982 hasta hoy. Fue jugador en muchos equipos del básquetbol capitalino, pero fue siempre Imperio Juniors su institución de cabecera. Hijo de Jorge Gutiérrez, quien dejó un gran legado en el deporte como uno de los principales emblemas de los Encuentros Nacionales de Minibásquetbol, Emilio fue el máximo desarrollador e impulsor de la disciplina 3×3 en nuestro país.
Con una trayectoria intachable, el profesor Emilio Gutiérrez brilló, además, fuera del rectángulo de juego. Fue coautor de los libros «El entrenador argentino de básquetbol» y «Perfil del jugador de LNB». Por otro lado, escribió, entre otras publicaciones de relevancia, «Basquetbol argentino. 1956, donde habita el olvido», que fue la inspiración para la realización del documental «Tiempo muerto» dirigido por Baltazar e Iván Tokman.
El básquetbol argentino, por completo, llora la pérdida de un personaje único, bohemio y querible que vivió por y para el básquetbol. Que impulsó proyectos, que educó a infinidad de alumnos y que siempre portó la bandera de la honestidad y el trabajo para conquistar objetivos.
Sin dudas, lo vamos a extrañar mucho. Hasta siempre, querido maestro.
