El 2019 arrancó con todo en Obras Basket, no sólo en lo deportivo, sino también en lo social. Es que, para el enfrentamiento con Regatas, y como parte del programa social «Obras en el básquetbol», regresó la acción «La Ruta del Rock», cuyo propósito es que hinchas y jugadores de equipos del área metropolitana vivan una experiencia única transportándose en el bus aurinegro para vivir un partido en primera persona y poder, de esta manera, interactuar con los jugadores aurinegros, tanto de Liga de Desarrollo como de Liga Nacional.
En esta ocasión, integrantes desde la categoría Premini hasta la U19 de Las Heras de Villa Ballester, transitaron un momento inolvidable. Una vez finalizada la experiencia, la dirigencia de Obras Basket también se encargó, nuevamente en el bus aurinegro, de brindar el recorrido de regreso para chicos, entrenadores, dirigentes y padres hasta la sede del club de origen.
Gastón Bertona y Víctor Andrade, reclutados del conjunto de Núñez y jugadores de Liga de Desarrollo, viajaron hasta Villa Ballester para encontrarse con los chicos de las distintas categorías de las Inferiores de Las Heras, compartir el viaje hasta el Templo del Rock y dar a conocer, a los más pequeños, sus vivencias dentro del mundo del básquetbol.
El trayecto contó con entretenimiento asegurado, debido al placer de los chicos de estar en los asientos que suelen encontrarse Fernando Zurbriggen, Pedro Barral, Phillip Lockett, Luca Valussi, entre otros. Jugaron, se divirtieron y escucharon atentamente la palabra de los jóvenes de Obras, quienes recibieron preguntas de todo tipo sobre lo que significa ser profesionales, previo al ingreso al estadio principal.
Luego, el destino más soñado, el arribo al Templo del Rock. Si bien había mucha concentración en la entrada en calor, los protagonistas del duelo entre Obras Basket y Regatas de Corrientes se tomaron un minuto para saludar a los invitados al gran espectáculo. Asimismo, la pasional mascota del aurinegro, Rocky, dijo presente para seguir incrementando el entusiasmo de los chicos.
Durante el encuentro, Las Heras de Villa Ballester tuvo su lugar en la Platea Norte, pero varios fueron convocados a pisar el parquet durante los tiempos muertos, con el fin de ser parte de los distintos juegos que incluían velocidad, fundamentos del deporte que tanto aman y mucha diversión.
Antes de concluir el evento, la delegación completa de Las Heras fue recibida en el parquet del estadio aurinegro por los jugadores de Obras Basket, quienes se mezclaron con los chicos para tomarse las tradicionales fotos grupales. Así, la Ruta del Rock volvió a transitarse y quedó, una vez más, un recuerdo imborrable y otro sueño de básquetbol completo en la mente y el corazón de cada uno de los visitantes.
